Un paseo botánico en el nacimiento del río Vinalopó
Teníamos muchas ganas de visitar la Sierra de Mariola, todo un símbolo del excursionismo y la botánica valenciana. Queremos conocer la parte alta del río Vinalopó hasta llegar a su nacimiento, a la fuente de la Coveta. Se trata de una ruta con un recorrido lineal de 3 kilómetros de ida y 3 de vuelta, que se realiza en un tiempo aproximado de una hora y media. El punto de partida es el Mas Ull de Canals, donde se encuentra el centro de visitantes del parque natural.
Lluís Serra experto en botánica, nos acompaña como gran conocedor de estas montañas. La Mariola es una sierra que ha tenido una fuerte presencia humana a lo largo de la historia. Cuenta con importantes yacimientos arqueológicos, al tiempo que se pueden contabilizar hasta 200 masías en su interior.
En nuestro recorrido para descubrir el nacimiento del río Vinalopó, encontramos muestras claras del aprovechamiento de la fuerza del agua para el desarrollo industrial con la aparición de un complejo fabril ya abandonado.
1200 especies se concentran en esta sierra
Además del valor patrimonial, este parque natural es un tesoro paisajístico con un clima diferenciado entre el continental, frío y seco, frente al litoral, más cálido y húmedo. Esto, junto a la diversidad de hábitats que ha creado la humanización del entorno, ha generado una gran riqueza natural. De hecho, un tercio de la flora valenciana, es decir, 1200 especies se concentran en esta sierra.
La cabecera más alta del río se deja ver exuberante gracias al agua de las últimas lluvias. Caminamos hasta encontrar la fuente de la Coveta, el manantial que simboliza el nacimiento del Vinalopó. Conversamos con Lluís sobre la diversidad de la Mariola, una sierra en la que podemos encontrar carrascales, robledales, un importante conjunto de tejos y la vegetación de ribera que nos acompaña a lo largo de la excursión de hoy.
Los restos del castillo del Vinalopó nos hablan de una sierra habitada desde hace siglos, incluso, milenios. Existen multitud de plantas medicinales que han atraído destacados botánicos europeos en los últimos siglos. También cada fin de semana sus cumbres son visitadas por numerosos excursionistas. Y es que la Sierra de Mariola es atractiva en muchos sentidos.
Antes de hacer el camino de vuelta, queremos descubrir un rincón de gran belleza. Con un ligero aumento del caudal de agua, el acceso a este encantador espacio natural se hace un tanto complicado. Con todo, llegamos al Charco Azul, un salto de agua que nos deja boquiabiertos. Sorprendidos de la belleza que atesora la Mariola, nos prometemos recorrerla más pronto que tarde.