A La Carta À Punt Mèdia

¿Alguna vez os habéis planteando cuántos residuos habéis generado durante todo un día, desde que os levantáis hasta que vais a dormir? En el programa 41 de Samarucdigital queremos que a partir de ahora prestéis atención a los desechos, esto que todas y todos producimos pero que preferimos no ver.

Residuos y más residuos es lo que comporta la urbanización progresiva y el aumento de la población. La generación imparable de desechos logró en 2016 los 2.010 millones de toneladas en todo el planeta. Si no tomamos medidas urgentes, los núcleos urbanos se enfrentarán en las próximas tres décadas a un aumento del 70% (3.400 millones de toneladas), tal como anuncian instituciones como el Banco Mundial. Teniendo en cuenta que los países con ingresos elevados, que representan el 16% de la población mundial, generan más de un tercio de los desechos en el mundo, es necesario habla de la problemática a pesar de que resulte incómodo. Aunque queremos contribuir a la sostenibilidad, cada cual de nosotros ensucia, a pesar de que no nos gusta admitirlo.

Francisco Colomer, profesor del Departamento de Ingeniería Mecánica y Construcción de la Universitat Jaume I de Castelló

Entrevista con Francisco Colomer

A pesar de que la problemática de los residuos nos acompañe desde largo tiempo, la conciencia ciudadana sobre la generación de los desechos representa uno de los mayores desafíos en las sociedades avanzadas. “Parece que la Unión Europea haya dejado como imposible el hecho de reducir, porque los países más ecológicos como Alemania o Suecia son los que más reciclan, pero también son los que más desechos producen. Nuestra mentalidad implica que una mayor calidad de vida consiste en un mayor consumismo, y eso genera más residuos”, lamenta Francisco Colomer, ingeniero agrónomo y profesor del Departamento de Ingeniería Mecánica y Construcción de la Universitat Jaume I de Castelló. Para conseguir reducir los desechos, es necesaria la coordinación perfecta entre ciudadanos, política y empresas. El principal problema del tratamiento de los residuos es, para Colomer, la falta de financiación. “El hecho de que la política europea, estatal y autonómica financie plantas de reciclaje, de clasificación de envases ligeros y de compostaje, hace que la sociedad se dé cuenta de que el esfuerzo en casa tiene un resultado positivo en el medio ambiente”, destaca.

Vicent Garcia, ingeniero químico y profesional al sector de las energías renovables y las tecnologías de la información

Entrevista con Vicent Garcia

Según los datos oficiales, se estima que la generación de residuos domésticos per cápita alcanza 1,5 kilos por persona y día, o el que es el mismo, 500 kilos por persona al año. ¿Es acertada la percepción de que lo estamos haciendo todo mal? “Cada tonelada que entra en una planta de tratamiento de fracción resta es un fracaso colectivo”, advierte Vicent Garcia, ingeniero químico doctorado en Ingeniería Nuclear por la Universitat Politècnica de València y que desde hace quince años trabaja en empresas dedicadas a las energías renovables y la tecnología de la información. Para Garcia, la mayoría de la gente y las instituciones quieren hacerlo bien, pero el problema son las herramientas disponibles para conseguirlo.

La normativa europea se basa en la máxima de quien contamina paga. Pero, ¿quién paga realmente, el fabricante o el usuario? “Si una empresa que fabrica botellas de agua tiene que asumir unos costes, los cargará al precio del producto, por lo tanto paga el consumidor que compra la botella. La máxima de ‘quien contamina paga’ hay que dotarla de un marco legislativo que actualmente no tenemos. Ahora todos los vecinos de una calle pagan exactamente lo mismo, y el comportamiento de cada cual es absolutamente libre de lo que haga. Vamos a la tendencia de quien contamina paga, pero la mayor parte de las situaciones en nuestro territorio no son así”, lamenta Garcia.

Emili Gombau, Ninguno del Servicio de Gestión de Residuos de la Consejería de Medio ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural

Entrevista con Emili Gombau

La clave de la gestión de los residuos reside en pensar en los desechos como fuente de energía, no despreciando los residuos como algo a desestimar, defiende Emili Gombau, geólogo de la Generalitat Valenciana, y desde junio de 2017 Cabeza del Servicio de Gestión de Residuos de la Consejería de Medio ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural.

“En los años 90, casi cada pueblo tenía una vertedero incontrolado donde se quemaba el estiércol, como pasaba con las aguas residuales. Las innovaciones en la implantación de sistemas de gestión a las depuradoras ha funcionado, y todos las aceptamos, pero en los vertederos nos ha costado algo más. A través de la gestión y la financiación de la Generalitat Valenciana a los ayuntamientos se ha conseguido erradicar todos los vertederos incontrolados en la Comunidad Valenciana, aunque quedan alguno de escombros y materiales de construcción, pero ha sido una tarea muy importante. Los grandes vertederos se han ido cerrando, sobre todo los más cercanos a la capital, pero todavía queda para sellar, con el objetivo de adecuarnos a la normativa europea, algunos vertederos en los que la Generalitat todavía está en proceso de cierre, como los trabajos en Basseta Blanca de Orilla-roja o la Murada de Orihuela, pero faltan recursos”, explica.

Hace 50 años, recuerda Gombau, tanto los recursos para hacer materiales y como las fuentes de energía eran muy cercanos, y los residuos se aprovechaban en el mismo entorno. “En la economía globalizada, tanto la utilización de recursos como la generación de residuos se hace en todo el mundo, con el problema de que la energía que gastamos al emplear un material aquí o enviarlo en China es muy grande, y antes no pasaba. El paradigma actual, el de la sociedad de consumo, es totalmente diferente. Era mucho más efectivo el uso de recursos en el propio entorno que no lo que pasa ahora. Es necesario ir hacia el reciclaje local, donde el papel de la comunicación es fundamental para dar a conocer la diferente tipología de sistemas a través de campañas”, resalta.

En la tertulia, Reis Juan convesa con Vicent Garcia, Emili Gombau o Batiste Miguel

Tertulia con Vicent Garcia y Emili Gombau

En el tiempo de la tertulia, Reis Juan conversa con Vicent Garcia, Emili Gombau y nuestro compañero Batiste Miguel sobre cuestiones que nos despiertan muchas dudas. Si las empresas están obligadas a buscar métodos para reducir el impacto de sus residuos, ¿por qué los habitantes generan el doble de desechos que hace dos décadas? El objetivo de vender y la existencia de la demanda del consumidor de productos más envasados han triplicado el uso de plásticos, como resultado del objetivo de garantizar la seguridad sanitaria de los productos alimentarios. ¿Podríamos volver a los métodos tradicionales como comprar a granel o devolver los envases de vidrio, si ha podido desaparecer la bolsa de plástico? ¿Cómo puede la administración contribuir al cambio? La materia orgánica representa más del 40% de los desechos, ¿qué hay que hacer para mejorar el proceso de recogida selectiva para evitar que se mezcle con la fracción resta (no orgánica)? Las reflexiones las encontraréis en el programa #41 en A La Carta de À Punto.

Finestra del Samaruc

Cada lunes abrimos una ventana muy especial, “La Finestra del Samaruc”, por la cual miramos con alguna persona muy conocida por todas y todos para que nos describa su paisaje preferido. En el #41 ha sido la blogger, guionista y escritora Fani Grande, que nos ha llevado a l'Horta Nord, reivindicando una flor muy típica del paisaje agrícola valenciano, la de la alcachofa.

So de la natura

El so de la natura nos acerca el medio ambiente a las onda de À Punt con los sonidos de los espacios naturales, de la mano de nuestro compañero, el biólogo Batiste Miguel. En esta ocasión, sin embargo, lo que hemos escuchado en el #SamarucdigitalResidus es uno de los oficios en peligro de extinción: el afilador.