El plástico de un solo uso, la cuenta atrás

Será un adiós definitivo? La problemática ambiental de los residuos plásticos y la adaptación de la industria centra el programa 92 de Samarucdigital ante el nuevo escenario marcado por la normativa europea

A La Carta À Punt Mèdia

Bolsas que asfixian cigüeñas. Redes de pesca que atrapan tortugas. Tapones que cubren la carne de los cangrejos, en lugar de los caparazones naturales. Son imágenes tan sobrecogedoras como las estimaciones del futuro. Los pronósticos avanzan que en 2050 nadarán en los océanos más plásticos que peces. 

No sabemos qué porcentaje de envases plásticos va a parar al contenedor amarillo, pero sí que sabemos cuánto de plástico acaba en los océanos. Solo a Europa lanzamos, cada año, medio millón de toneladas de plástico en el mar, el 70% de los cuales son desechables. Pero la culpa no la tiene el material.

Sin plástico no habría industria. Ligero y barato, el plástico facilita el diseño y permite reducir materiales. El problema está en el abuso. Mientras pagar las bolsas de plástico de la compra pare que ayuda a reducir y reutilizar, los supermercados venden todavía fruta sin corteza, pero envuelta, eso sí, de plástico. Es el absurdo de la cultura del envase, que desprecia el contenido, decía Eduardo Galeano.

Ecologismo, el primer paso

Todo cambio necesita siempre un primer paso esencial, el de la concienciación. Los grupos ecologistas fueron los primeros al señalar el plástico entre las mayores amenazas ambientales que afectan el planeta. El plástico como símbolo de la economía desbocada de usar y tirar ha calado en la ciudadanía y en la administración. Es lo que demuestra la aprobación de normativas que pretenden reducir su consumo. Hablamos de la directiva europea que prohíbe los plásticos desechables a partir del 2021.

Ocho millones de toneladas de plástico, en gran parte de envases ligeros, acaban cada año en los océanos. Para haceros una idea de la cantidad, es como echar en el mar un camión de residuos por minuto. La luz de alerta por los residuos plásticos ha crecido desde que Greenpeace, abordo del Rainbow Warrior, pusiera en marcha la campaña ‘Menos plástico, más Mediterráneo’, situando los productos plásticos en el punto de mira del ecologismo, como el calentamiento global, la contaminación o la sobreexplotación de los recursos naturales.


En la Comunitat Valenciana, Xaloc-Hermanos de Sal, organización no gubernamental dedicada a la conservación marina, es uno de los colectivos más activos en concienciar sobre los efectos del plástico en nuestro entorno. De hecho, estas últimas semanas, ha organizado una actividad de recogida en las playas del Saler y Pinedo. Recibimos en el estudio al biólogo y miembro de Xaloc, Carles Gago.

 Foto Xaloc: limpieza en les platges del Saler i Pinedo

La costa valenciana se ha convertido en una de las más afectadas por el problema global de los vertidos de plásticos en el mar, según un informe del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), que sitúa las playas valencianas en la quinta posición del Mediterráneo entre las más afectadas. El estudio indica, además, que el turismo incrementa de manera significativa la generación de residuos en las costas mediterráneas. De hecho, en algunos municipios costeros, los visitantes de verano generan un aumento del 30% de residuos.


La fauna marina en peligro

Tan importante como los movimientos ambientalistas, la investigación es clave en la hora de comprender la dimensión del problema de los residuos plásticos. Estudios europeos pioneros, en los cuales participa la Universitat de València, intentan determinar hasta donde llega la presencia de desechos de plástico en el mar y como afecta la vida marina en el Mediterráneo. Es el caso del estudio MEDSEALITTER, que tiene como objetivo el análisis de cetáceos, peces y poliquetos, y de la investigación INDICIT, dedicado a estudiar las tortugas marinas. 

Hablamos con Olga Novillo, investigadora en zoología marina en el Instituto Cavanilles de Biodiversidad y Biología Evolutiva de la Universitat de València (ICBiBE). Como miembro de los proyectos de estos investigación, sus líneas de trabajo se centran en la relación de los microplàstics y los efectos en la salud de la fauna marina y los humanos.

 Olga Novillo

En busca de alternativas

En la Unión Europea, aproximadamente el 85% de los desechos marinos --mesurados por recuentos en las playas-- es residuo plástico, de los cuales los productos plásticos desechables representan el 70%. Con Eva Verdejo, investigadora del Instituto Tecnológico del Plástico (AIMPLAS), conocemos los plásticos de un solo uso y analizamos la adaptación de la industria al futuro escenario marcado por la normativa europea.

La gravedad del problema de los residuos plásticos no solo mueve las administraciones a tomar medidas. La ciencia también trabaja para encontrar alternativas que ayuden a hacer la transición hacia un modelo más respetuoso con el entorno. Y en ese cambio, la industria alimentaria tiene mucho que decir. 

Los envases llegaron para alargar la vida de los alimentos frescos. Tàpers, vasitos de plásticos y envasados al vacío pueblan la despensa para competir con el paso del tiempo. Hoy se estima que los envases de plástico destinados a la alimentación a Europa llega al 60% y producimos 30 kilos de residuos por persona al año.

Soluciones como los materiales biodegradables ganan cada vez más peso en la investigación de los envases sostenibles. Un ejemplo es la iniciativa YPACK, un proyecto europeo financiado por el programa Horizonte 2020, destinado a investigar el diseño de envases biodegradables que podrán reducir el uso de petróleo y las emisiones de efecto invernadero, además de avanzar en soluciones para evitar la contaminación de los residuos plásticos.

La iniciativa YPACK pertenece a un consorcio de unos veinte miembros de once países, liderado por el grupo que dirige Chema Lagarón, investigador del Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos (IATA) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

 Kristin Suleng, Chema Lagarón, Carles Gago y Olga Novillo 

El Sonido de la Natura 92 – La gaviota patiamarilla (Larus michahellis)

“Lo gavinot argentat es una ave oportunista que se encuentra como casa en los hábitats alterados por los humanos. La solemos ver en playas y puertos, aunque también por ciudades y vertederos. No es difícil observar algún individuo joven peleándose con un trozo de plástico, aprendiendo a convivir con nuestros desechos”, relata Batiste Miguel en el Sonido de la Naturaleza.


Ventana del Samaruc 92 - Pablo Rus, Godella (Huerta Norte)

El director de orquesta Pablo Rus abre la Ventana del Samaruc para llevarnos a su paisaje de niñez, Godella, en la comarca de l'Horta Nord.


Biblioteca Verde 92 - Meritxell Salvany, ‘Un mar de plástico’

La traductora Meritxell Salvany presenta en la Biblioteca Verde ‘Un mar de plásticos’, un libro que explica como el océano se está convirtiendo en un vertedero que afecta gravemente la salud de la fauna y la flora marinas. La historia de un fulmar boreal (Fulmarus glacialis), ave marina que habita las costas del Atlántico Norte, es el hilo conductor para exponer las consecuencias del uso masivo e irresponsable del plástico y la necesidad de limitar el consumo. Además, el título aborda las soluciones técnicas propuestas para afrontar el problema de los residuos plásticos en el mar y como puede contribuir cada cual en su día a día.


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