Una ciudad para los murciélagos
La ciudad de Almassora ha decidido aliarse con los murciélagos para hacer frente a las plagas de mosquitos y otros insectos que cíclicamente producen molestias entre los vecinos de esta población. El Ayuntamiento a través del departamento de Sostenibilidad ha instalado por varios puntos de la ciudad y del término municipal unas 60 cajas de madera para crear refugios seguros para los quirópteros.
Almassora es una ciudad castellonense de la comarca de la plana alta con una población cercana a los 26000 habitantes. Como otros pueblos y ciudades valencianas ha sufrido el azote de los mosquitos como el tigre (Aedes albopictus) en carne de los mismos vecinos. Esta primavera, verano y otoño el ataque de los mosquitos tigres, mosquitos de otras especies y moscas negras, entre otros insectos, no ha sido tan alarmante como el año pasado. Pero el Ayuntamiento de Almassora ha decidido acometer una actuación a largo plazo para controlar las plagas cíclicas de los insectos picadores. El Consistorio a través del Departamento de Sostenibilidad de la concejalía de Medio Ambiente ha instalado 55 refugios de madera capaces de alojar hasta 100 animales cada uno. Las cajas han sido construidas por carpinteros de la localidad e instaladas por la empresa valenciana Càdec Taller de Gestión Ambiental. Los lugares escogidos para ubicar los refugios han sido: el paraje de Santa Quiteria, el distrito marítimo, los alrededores del casco urbano y las fachadas de varias casas particulares que han acogido de buen gusto la presencia de los quirópteros.
La mejor ubicación para las cajas
No todos los lugares son adecuados para instalar las cajas refugio. Los técnicos han buscado lugares con las características óptimas para que los murciélagos puedan acceder a las cajas con la máxima seguridad. Por ejemplo es muy importante que los refugios estén a unos 3,5 metros del suelo y en un lugar sin obstáculos por los alrededores para permitir la entrada y salida de los quirópteros. La orientación también se debe valorar. Las cajas orientadas hacia el norte se convertirán en refugios de invierno y las ubicadas hacia el este o sureste podrán albergar colonias de cría, ya que recibirán mayor insolación necesaria para llevar adelante el éxito de la reproducción.
33 especies de murciélagos en España
España cuenta con 33 especies de murciélagos. La mayoría son insectívoras a excepción de una especie que también come peces como es el murciélago ratonero patudo (Myotis capaccini). Las dos especies más habituales en pueblos y ciudades son el murciélago común (Pipistrellus pipistrellus) y el murciélago de Cabrera (Pipistrellus pygmaeus). En el pasado eran más abundantes en el entorno urbano pero la utilización excesiva de pesticidas, plaguicidas, herbicidas y la falta de agujeros y grietas hizo que cada vez fueran más escasos.
Los murciélagos y las matemáticas
A partir de ahora la ciudad de Almassora contará con nuevos vecinos silenciosos, nocturnos y con una capacidad extraordinaria que beneficia tremendamente a los humanos: comen mosquitos, moscas, mariposas y otros insectos para alimentarse. La ocupación de las cajas refugio de madera no será inmediata. Los biólogos informan que pasará al menos 1 año antes de que decidan entrar a vivir. De cualquier modo y mientras los quirópteros lo piensan no hay que perder de vista una serie de cifras interesantes como por ejemplo que un solo murciélago puede consumir en una sola noche hasta 3000 mosquitos o que en una sola caja refugio pueden entrar a vivir hasta 100 animales. Favorecer estas colonias puede ser muy importante e inteligente para combatir los insectos, ya que al lado de casa podremos tener a unos animalitos inofensivos comiendo hasta 300 000 mosquitos en una sola noche. Pero además hay que pararse a pensar que serán los vecinos de una sola caja refugio.