Dedicamos el primer episodio a conocer una iniciativa pionera, impulsada por la Diputación Provincial de Castelló y la Universitat Jaume I que comenzó su edición piloto a finales del año 2020. Bajo el título Talento Rural, el tándem formado por ambas instituciones ha puesto en marcha un alentador proyecto que conecta el ámbito académico con el tejido empresarial rural, haciendo posible que el estudiantado universitario realizo sus prácticas externas a pequeñas entidades ubicadas a localidades de interior que no superan los 3000 habitantes.

El objetivo del programa es acercar el encuentro de esas demandas y ofertas de talento, experiencia laboral y convivencia al entorno rural con una elevada calidad de vida, orientando a aquellos que desean afrontar el reto de una práctica inédita al ámbito académico, profesional y personal. La Tabla del Samaruc cuenta con los testigos de sus protagonistas: empresariado rural, alumnado universitario y representantes institucionales. La suma de sinergias resulta imprescindible por tal convertir el medio rural en un fértil terreno donde emprender nuevos proyectos laborales y vitales.

La vicerrectora de Estudiantes y Compromís Social en la Universitat Jaume I de Castelló, Inmaculada Rodríguez, explica cuáles son las características, objetivos y destinatarios del programa Talento Rural: "un reto inédito al ámbito académico, profesional y personal, que rompe los prejuicios de los jóvenes hacia el Interior, crea sinergias con el talento que reside en estos municipios y favorece la adquisición de competencias extracurriculares".

Pau Ferrando, diputado provincial de Promoción Económica, Ocupación e Internalización, destaca la necesidad de descentralizar los espacios de creación de riqueza y canje del conocimiento, favoreciendo que estas sinergias es produzcan también al Medio rural.

José Iglesias es ingeniero técnico y gerente de Controldrop, una empresa tecnológica ubicada en Vall d'Alba, que se dedica al sector de las embotelladoras. Al enterarse de la existencia del proyecto, consideraron que se trataba de una buena oportunidad para atraer el joven talento formado en la universidad, y decidieron participar. El resultado de su experiencia es que a estas alturas, el estudiante acogido en prácticas se ha convertido en un nuevo miembro de la plantilla de la empresa y ha trasladado su residencia en una pequeña localidad próxima a su puesto de trabajo.

La Cooperativa Agrícola de Atzeneta cuenta con 75 años de trayectoria al sector agroalimentario, a pesar de que a lo largo del tiempo ha sabido adaptarse y diversificar la actividad, para satisfacer las necesidades de sus asociados. Eladi Roca es el gerente de esta entidad, que representa un buen ejemplo del dinamismo y capacidad de evolución desde el cooperativismo. Su experiencia como empresa participando en lo programa Talento Rural, significó la posibilidad de establecer una relación mutua de aprendizaje y convivencia. Roca valora el momento actual como un punto de inflexión para frenar el despoblamiento, y mete de manifiesto la necesidad de empoderar el medio rural.

Laura Ausejo, estudiando del Grado de Administración de Empresas, completó su estancia en prácticas al Hotel la Rosaleda del Millares, ubicado en la localidad de Montanejos. A pesar de que inicialmente, el sector turístico y hostalero no hacían parto de sus planes de futuro, la posibilidad de participar a Talento Rural le ha permitido adquirir nuevas competencias e incluso, otorgarle un nuevo enfoque a su trabajo de Final de Grado, reconduciéndolo hacia nuevos nichos de ocupación. Su vivencia ha supuesto un cambio en la manera de pensar y una excelente oportunidad de crecimiento profesional y personal.