Stop War, la guerra comienza aquí
Un grupo de activistas se ha encaramado a estructuras en la zona de carga del buque saudí donde han desplegado pancartas con el lema “STOP WAR” y “LA GUERRA EMPIEZA AQUÍ” para interferir de forma noviolenta en las operaciones del barco Bahri Abha. Afirman que está confirmado por fuentes oficiales que el barco de la naviera estatal saudí transporta armamento cargado en EEUU con destino Arabia Saudí y que probablemente son blindados LAV-III canadienses y bombas guiadas por láser GBU-12, de fabricación estadounidense como las que son usadas hasta ahora por el ejército de este país en la guerra del Yemen con consecuencias devastadoras para la población de su país. Denuncian que además se cargarán en el barco contenedores con materiales peligrosos en horario nocturno sin las autorizaciones excepcionales correspondientes y junto a los depósitos de gas de Saggas.
El martes 10 de diciembre de madrugada, un grupo de siete pacifistas y ecologistas han conseguido acceder al recinto portuario de Sagunto y llegar al muelle destinado al atraque del buque saudí de transporte de armamento Bahri Abha, donde han conseguido encaramarse a una estructura cercana para desplegar unas pancartas con los lemas “STOP WAR” y “LA GUERRA EMPIEZA AQUÍ”. Esta acción de desobediencia civil noviolenta tiene como objetivo protestar contra la presencia en el puerto de Sagunto de este buque de la naviera estatal saudí Bahri, cuya flota transporta rutinariamente ocho veces al año armamento procedente de EEUU (por valor de 1130 millones de € en 2018) y diferentes países europeos hacía Arabia Saudí (incluida España, el quinto proveedor de este país), desde donde es empleado desde hace 5 años en la guerra del Yemen con consecuencias devastadoras para la población yemení incluso en forma de crímenes de guerra, como denuncian agencias internacionales de DDHH y la ONU. El cargamento armamentístico del Bahri Abha fue confirmado por la Autoridad Portuaria de Valencia, que afirmaba que contaba “con todos los permisos”.
Probablemente, según analistas internacionales del comercio de armas, se trata en este caso en parte de blindados LAV-III canadienses y bombas guiadas por láser GBU-12 de fabricación estadounidense. Según los y al activistas, estas exportaciones tendrían que ser consideradas ilegales si nos atenemos a la propia legislación española y europea sobre comercio de armas debido a la situación de inestabilidad y de conflictos armados existente en la región de Oriente Medio.
“La guerra empieza aquí”
Es lo que afirman, bajo el lema “La guerra empieza aquí”, más de 60 organizaciones pacifistas, de apoyo a la población refugiada, sindicales, feministas, y de todo tipo, que demandan en un manifiesto que no se permita la entrada a puerto del barco saudí para no colaborar ni ser cómplices de sufrimiento de la población civil en Yemen. Estas organizaciones exigen que no se permita la entrada a puerto del barco saudí. La iniciativa ha sido promovida inicialmente por el grupo pacifista valenciano antimilitaristes-moc. A estas peticiones se sumó reciente el gobierno municipal de Sagunto con una declaración reclamando al gobierno español que no permita la entrada de estos barcos en Sagunto ni en ningún puerto español. Probablemente por este clima de protesta, el buque ha forzado máquinas para adelantar su llegada cuatro horas inesperadamente.
El grupo de activistas noviolentos ha decidido emprender esta acción de desobediencia ante la negativa de las autoridades competentes a escuchar esta pluralidad de voces que piden prohibir el atraque de estos buques, y para intentar hacer visible e interrumpir el circuito de la guerra, que necesita para seguir en funcionamiento de infraestructuras civiles y complicidades como las que permiten la escala de los buques de Bahri.
Los y las activistas también señalan la terrible ironía que supone que esta escala de un cargamento con el que se cometerán crímenes de guerra, que prolonga y aumenta la violencia y los daños de millones de personas en la guerra del Yemen y otros lugares, se produzca además en el Día Internacional de los DDHH.
También quieren señalar con esta acción que la aparente libertad de movimientos con que se desplaza el armamento por el mundo contrasta inquietantemente con la terrible situación de las decenas de millones de personas refugiadas, en su mayoría a causa de las guerras donde se emplea ese armamento, personas que buscan protección y se encuentran con muros, vallas de cuchillas, la muerte en el mar y leyes racistas.
La guerra de Arabia Saudí en Yemen
La guerra que libra Arabia Saudí en Yemen con armamento estadounidense y europeo contra las milicias huzíes apoyadas por Irán desde hace cuatro años, lleva infligiendo un indecible sufrimiento a su población yemení, como vienen constatando reiteradamente las principales agencias humanitarias y organizaciones de DDHH internacionales. Esto ha llevado a los gobiernos de Reino Unido, Noruega, Finlandia, Francia y Alemania ha declarar una moratoria a la venta de armamento a Arabia Saudí, moratoria que España ha decidido no secundar.
Las personas y organizaciones que suscriben la declaración también demandan que el gobierno autonómico y los gobiernos municipales se posicionen públicamente con claridad en contra del uso de estas infraestructuras civiles para el transporte de material armamentístico, animan a los trabajadores encargados de la asistencia y la carga y descarga a que ejerzan la objeción de conciencia por la paz negándose a realizar dichas tareas, siguiendo el ejemplo del bombero Ignacio Robles en el puerto de Bilbao, o la huelga de los estibadores del puerto de Génova.
También demandan que se suspenda inmediatamente el comercio de armas español hacia países implicados en guerras, como Arabia Saudí y el progresivo desmantelamiento y reconversión de la industria de la guerra. “Es un falso dilema que tengamos que elegir entre puestos de trabajo aquí y muertos y refugiados en Yemen y otros lugares”, afirman.