Las Variedades Tradicionales de Cultivo (VTC) y los Conocimientos Tradicionales Asociados (CTA) son una cuestión cada vez más presente en las conversaciones de quienes dialogan y reflexionan sobre la relación con el legado agrícola y rural. En las comarcas castellonenses, esta herencia biocultural está realmente presente: todavía quedan personas que cultivan, comen y conservan VTC, que no son otras que aquellas variedades de hortícolas y fruteros que nos han acompañado desde siglos en nuestro territorio. Son el fruto de un laborioso proceso de selección y mejora, que durante años las labradoras y labradores han llevado a cabo con el fin de conseguir unas variedades más resistentes y adaptadas a las condiciones de su territorio. Lamentablemente, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) aprecio que durante el último siglo se ha perdido el 75% de la diversidad agrícola mundial y esta tendencia negativa continúa.

En clave local, las zonas rurales de las comarcas castellonenses destacan por su riqueza ecológica, cultural e histórica y en muchos pueblos se continúan conservando prácticas y conocimientos de los sistemas agrícolas tradicionales, así como variedades de cultivos, que pueden proporcionar herramientas para plantear una agricultura más sostenible y resiliente. A pesar de esto, el territorio se enfrenta a un grave proceso de despoblamiento y abandono que comporta la degradación de los agroecosistemas, así como una alarmante pérdida de VTC y de su CTA, que pose en riesgo la conservación y pervivencia de estos recursos y saberes tradicionales.

Un proceso participativo

Para remediar esta dinámica, la asociación Conecta Natura, con el apoyo de la Consellería de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática de la Generalitat Valenciana, ha puesto en marcha un proceso participativo para el impulso de una red ciudadana para recuperar, conservar y revalorizar las variedades tradicionales de cultivo, la cultura labradora y los agroecosistemas rurales de nuestro territorio.

A lo largo del año 2022, este proceso ha puesto de manifiesto que existe un sector de la sociedad sensibilizado con esta problemática y con la motivación e implicación necesaria para trabajar en este quehacer. Más concretamente, se ha conformado un grupo de más de 40 personas que ya están cultivando y caracterizando variedades de hortícolas y frutales a sus respectivas fincas, así como multiplicando y conservando entonces para construir un banco de entonces comunitario. Todavía más, el número de personas inscritas por el año próximo es muy superior y no para de crecer.

El proceso participativo también ha diagnosticado la urgencia de desarrollar acciones de conservación y ha permitido identificar las principales necesidades y demandas compartidas por los habitantes del medio rural castellonense para preservar su patrimonio agrícola y cultural. Estas necesidades y demandas se recogen en el Pacto por la recuperación, conservación y revalorización de las VTC y los CTA de las comarcas castellonenses.

La adhesión al pacto se propone como una forma de apoyo institucional, empresarial y particular a este proyecto, que implica el compromiso de promover o participar de las acciones de recuperación, conservación y revalorización así como de fomentar la creación y desarrollo de la red.

Enlace para adherirse al Pacte
Enlace del pacto PDF