EL día 9 de noviembre a las 4:20h de la noche de luna llena y dentro de un parámetro normal de gestación, en el día 653, la elefanta Matla ha parido la primera cría de elefante de BIOPARC Valencia. Un hecho histórico que ha conmovido a todo el equipo que, desde hacía semanas, esperaba el feliz desenlace. El protocolo establecido implicaba una completa monitorización no intrusiva mediante un sistema de cámaras. El objetivo era vigilar la evolución del estado de la hembra y que el parto se produjera de forma natural. Pasada la medianoche, entre la 1h y la 1:30h se observó que comenzaban las contracciones que se intensificaron sobre las 4h y, pocos minutos después, rápidamente nacía el precioso “bebé”. Las impactantes imágenes, unido a la sorpresa por la celeridad del instante y el comprobar que todo el proceso se estaba desarrollado con absoluta normalidad, ha desatado una inmensa emoción entre el personal encargado de su cuidado.

El importante nacimiento de este primer elefante “valenciano” es una gran alegría y se produce dentro del Programa Europeo de Conservación de Especies en Peligro del elefante (EEP). Representa un primer éxito en el intenso trabajo que se está realizando en BIOPARC Valencia que tiene un destacado papel al albergar un grupo de seis hembras. En este contexto es necesario recalcar que el pasado año la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) cambió el estatus de las dos especies de elefantes africanos en su Lista Roja. Ambas figuraban como vulnerables. Ahora el elefante de bosque (Loxodonta cyclotis) se considera en peligro crítico y el que alberga BIOPARC, el elefante de sabana (Loxodonta africana), se ha catalogado en peligro de extinción.

 La elefanta Matla ha parido la primera cría de elefante de BIOPARC Valencia

Durante las primeras horas el “elefantito” se muestra vivaz e instintivamente sigue y busca el amparo de la madre. Matla, aun siendo primeriza, se está comportando de forma ejemplar, se muestra protectora y de manera innata ha comenzado a atender y amamantar a su retoño. Este periodo inicial preocupaba especialmente y, pese a que la situación parece evolucionar adecuadamente, el transcurso de la jornada y el seguimiento del progreso y crecimiento es fundamental. Aunque estos animales nacen con un peso de entre 80kg y 100kg su fragilidad es evidente y es necesario mantener la cautela. En este sentido, se está trabajando para garantizar la tranquilidad y máximo bienestar de madre y cría, así como del resto del grupo de elefantes. Cabe destacar igualmente la reacción de toda la “manada” que, con una sonora barritada que incluso ha recogido el equipo audiovisual instalado, ha manifestado su interés, curiosidad y entusiasmo ante este nuevo integrante que, sin duda, será el centro de atención.