A La Carta À Punt Mèdia

A pesar de ser un tesoro de la biodiversidad, la flora endémica, rara o amenazada ha sido ignorada durante años por la política tradicional de protección del medio ambiente. Para ponerla en valor, hace veinticinco años se creó una herramienta destinada a conservar la flora valenciana. Hoy es la única figura jurídica en la Unión Europea dedicada en exclusiva a la protección del patrimonio florístico. Hablamos de las microrreservas de flora (MRF). Como su nombre indica, ocupan espacios pequeños en islotes, dunas o lagunas temporales, que no superan las 20 hectáreas de extensión.

 Ojo de perdiz, Silene diclinis

A finales de 1998 se declararon las primeras microrreservas en las islas Ferrera y Foradada, en el archipiélago de Columbretes. Desde entonces, la red ha crecido hasta más de 300 espacios valencianos legalmente declarados, a pesar de que continúan los problemas de la erosión del litoral, la presión turística y el abandono de los terrenos que amenazan su supervivencia. En la nueva entrega, Samarucdigital propone ver el mundo vegetal a pequeña escala, y además, presta atención a los medios que se invierten al proteger los espacios pequeños de flora.

Emili Laguna, el impulsor de las microrreservas

La Comunidad Valenciana es una de las regiones con más riqueza de flora de Europa, gracias a la variedad botánica de la que forman parte un número elevado de especies endémicas, raras y amenazadas. Por eso no es extraño que los valencianos fuéramos pioneros en crear la red de microrreservas de flora, que este año cumple 25 años de existencia. Las microrreservas han traspasado fronteras, y no han parado de crecer en casa nuestra. Este año se han sumado ocho microrreservas más en la provincia de Castelló. En total, son 312 espacios declarados en la Comunidad Valenciana, que ocupan 2.400 hectáreas, el que significa una milésima parte de nuestro territorio. Pero, que no nos engañen los números. A pesar de que sea pequeño, en esa milésima parte está representada el 65% de toda la flora autóctona valenciana.

 Emilio Laguna, impulsor de las Microreservas de Flora

Celebrar los 25 años de las microrreservas de flora también es homenajear a una persona comprometida con el medio ambiente. Detrás de esta figura de protección de las especies silvestres está Emili Laguna, botánico y biólogo, reconocido dentro y fuera como el impulsor de las microrreservas de flora. Laguna trabaja como jefe de Protección de Recursos Naturales en el Servicio de Vida Silvestre de la Generalitat Valenciana. También ha sido colaborador de Samarucdigital i de la primera temporada de Samarucdigital en la televisión de À Punt. La red de microrreservas de flora, su proyecto más estimado en sus cuarenta años de dedicación a la naturaleza. Este reconocido botánico nos explica la red de las microrreservas, la más densa de conservación de flora en todo el mundo.

"Las microrreservas son una herramienta didáctica de ciencias naturales en casa para dar a conocer aquello que se mira pero no se ve. Aquello que no se estima, no se puede conservar"Emili Laguna

Aniversario en el Jardín Botánico de la UV

La semana pasada, el Jardín Botánico de la Universitat de València le dedicó una jornada especial a la conmemoración del 25 cumpleaños de las microrreservas. Samarucdigital asistió a la conferencia y habló con los ponentes, como el biólogo mallorquín Joan Mayol, que cuenta con un largo currículum en tareas de conservación de la naturaleza de la administración balear. En las Islas todavía no ha llegado la figura de las microrreservas, pero la colaboración en materia ambiental entre Autonomías es constante.

Aquello innovador, por contraste con el marco conservador que suele definir la protección ambiental, es una de las características de las microrreservas que resalta Angelo Salsi, jefe de la unidad LIFE y Eco-Innovación de la Agencia Europea Ejecutiva para las PYMES (EASME), para quienes las microrreservas representan todo un símbolo de trabajo en red.

Prevención ante la presión urbanística

Las microrreservas no son solo materia de biología o botánica. La geografía también tiene mucho que decir, al suponer esta figura de protección una medida preventiva para frenar el deterioro del entorno. Entre las amenazas que sufren las microrreservas, los expertos señalan que suelen ocupar áreas restringidas por el territorio valenciano coincidiendo con formaciones arbustivas que pueden ser calificadas como "matorral degradado", y, por lo tanto, encontrarse en el punto de mira del proceso urbanizador.

 La microrreserva de flora de Punta de la Glea en Campoamor

A pesar de los años desde la propuesta de las primeras microrreservas, continúa existin un vacío territorial en el litoral. Se tendría que incentivar la creación de más declaraciones de microrreserva como prevención ante la expansión urbanística? Lo hablamos con Ascensión Padilla, directora del grupo de investigación Medio, Sociedad y Paisaje (MedSpai), del Instituto Interuniversitario de Geografía en la Universitat de Alicante.

La protección que llega de Europa

La creación de microrreservas de flora también ha servido para crear microrreservas de fauna, aportando unos valores ecológicos reconocidos en la Red Natura 2000, que sirven para canalizar las ayudas europeas como los fondos FEDER o los proyectos LIFE con una finalidad que va mucho más allá de recuperar hábitats y biodiversidad.

Las microrreservas son una herramienta útil y madura que ha evolucionado como otras figuras de protección ambiental: desde las acciones en los años 90 enfocadas a salvar especies o hábitats, a impulsar pruebas piloto y experiencias transferibles o replicables en otros entornos. Ahora, los proyectos europeos han pasado de la restauración y la recuperación ambiental a crear proyectos de acción como respuesta a los cambios urgentes que impone la emergencia climática.

 Pablo Vera

Con el biólogo Pablo Vera, técnico de SEO/BirdLife en la Comunitat Valenciana, entidad dedicada a la conservación y estudio de las aves y sus hábitats, abordamos las implicaciones de la conservación de los espacios mediante figuras de protección, y si se ha alcanzado el momento en que mantener las microrreservas se ha tornado en algo más importante que declarar nuevas zonas."En el marco de los programas LIFE, de cada euro que se invierte en conservación, hay un retorno de tres a cuatro euros de beneficio social. La conservación es rentable", Pablo Vera

So Natura 80: matorral, ribera, Tinenza y dunas

En el programa que dedicamos a la biodiversidad de las microrreservas, Batiste Miguel nos trae en el So de la Natura cuatro sonidos muy representativos tanto del interior como del litoral: el matorral, la ribera, la Tinenza y las dunas.

Finestra del Samaruc 80: Daniel Abad Casanova, Asp (Vinalopó Mitjà)

Nos asomamos a la Finestra del Samaruc al sur de nuestro territorio. En concreto, viajamos al municipio de Aspe, en la comarca del Vinalopó Mitjà. Y lo hacemos con la batuta reconocida de Daniel Abad Casanova, director titular y artístico de la Orquesta de Cámara de la Comunidad Valenciana.

Biblioteca Verda 80: Simón Fos, Les plantes del nostre entorn. Flora silvestre de Paiporta

La flora también ocupa la Biblioteca Verda del #SamarucDigitalMicroreserves. Acogemos el título Les plantes del nostre entorn. Flora silvestre de Paiporta, galardonado con el Premio de Estudis Locals que convoca este municipio de l'Horta Sur. El botánico Simón Fos, coautor del libro, es miembro del equipo responsable de la gestión de la Red de Microrreservas de Flora de la Comunidad Valenciana. Fos nos hace un resumen del contenido que encontraréis en las páginas de esta obra dedicada al patrimonio florístico local.

Fotografia de portada: Microrreserva Mas del Cotet. Manuel Vicedo.