La Asociación de Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA) denuncia que en la presente temporada de caza de aves acuáticas, que en el sur de Alicante se inició el pasado 1 de noviembre, la Consellería de Transición Ecológica autoriza a matar 15.155 ejemplares, de 13 especies de aves acuáticas, entre los diferentes cotos de caza situados en los humedales sudalicantinos, mientras que el censo realizado en enero de 2021 y que en teoría debería servir para ajustar el número de aves autorizadas a ser cazadas, no alcanza las 5.000 aves. Lo que en la práctica significa que la Generalitat Valenciana autoriza a matar la totalidad de las aves acuáticas, catalogadas como cinegéticas, presentes en todos los humedales del sur de Alicante.

El grupo ecologista informa que la caza de aves acuáticas en la Comunitat Valenciana se regula mediante los Planes Técnicos de Ordenación Cinegética (PTOC), en la actualidad los PTOC que se encuentran en vigor en el sur de Alicante, fueron aprobados en 2017 y desde hace años AHSA ha estado denunciando las irregularidades en la atribución del cupo de aves que se autoriza matar cada año. Además de otras detectadas por técnicos de la Consellería de Transición Ecológica que consistían en la autorización de la implantación de un coto de caza en este espacio natural que no cumplía las condiciones establecidas para ello en el Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del Parque Natural de El Hondo o la autorización de una modalidad de caza prohibida por esta legislación. AHSA recuerda que desde la Dirección Territorial de Alicante de esta Consellería se inició la tramitación de la modificación de las irregularidades detectadas en los PTOC y que finalmente se dejó caducar los expedientes.

Amigos de los Humedales advierte de que aparte de la ilegalidad manifiesta de los mencionados PTOC, permitir cazar la totalidad de las aves consideradas cinegéticas está teniendo un efecto devastador para las poblaciones de especies con una tendencia negativa. Es el caso de la focha común, que en enero de 2021 fueron censados 948 ejemplares en todo el sur de Alicante y sin embargo unos meses después se autoriza a matar 3.571 de ellos. Un ave acuática que hace años era abundante en los humedales sudalicantinos y que en la actualidad sufre un declive fuerte, tal y como registra el propio Ministerio de Transición Ecológica, siendo una de las 9 especies de aves comunes en España en esta situación.