La Marjal de Almenara es un humedal que se extiende entre las comarcas de La Plana Baixa y el Camp de Morvedre y cuyos límites geográficos los marcarían las desembocaduras del río Belcaire al norte y el Palancia al sur. Como el resto de humedales litorales ha sufrido una gran presión antrópica para obtener tierras de cultivo, lo que unido a la sobreexplotación de los acuíferos la llevaron prácticamente a la desecación a finales del S. XX. 

No obstante las iniciativas de conservación y restauración llevadas a cabo de forma conjunta por ONGs conservacionistas como AE-Agró, la Conselleria de Medi Ambient y el Ayuntamiento de Almenara han permitido la recuperación de los distintos hábitats de este espacio natural que le ha valido la declaración  de la Generalitat Valenciana como zona húmeda protegida. 

Gran variedad de hábitats característicos del paisaje costero mediterráneo

Dentro de los límites del  paraje se puede encontrar una gran variedad de hábitats característicos del paisaje costero mediterráneo como las dunas costeras, donde cría el amenazado Chorlitejo chico, y los saladares , con presencia de una flora asociada característica y una avifauna asociada que va cambiando en función de la época del año y que incluye desde limícolas como las Cigüeñuelas a paseriformes como Tarabillas comunes y que se incrementan en periodo de migración con especies escasas en nuestro territorio como la Bisbita de Richard, por citar alguna.

Pero en el espacio natural destacan los hábitats inundados como las lagunas conocidas como Els Estanys y las turberas calcáreas, muchas transformadas en arrozales, que acogen miles de aves (tanto residentes como invernantes o en migración) que conformarían una extensa lista con más de 200 especies. Desde los majestuosos Flamencos que hacen las delicias de los visitantes, pasando por los tornasolados Moritos, hasta pequeños paseriformes como el Carricerín real o el espectacular Martín pescador, un destello azul que surca acequias y lagunas en vuelo rasante, el humedal ofrece oportunidades para disfrutar del birding en cualquier época del año.

 Los majestuosos Flamencos que hacen las delicias de los visitantes

La lista de especies que un observador de aves puede encontrar aquí continuaría con un buen número de anátidas, algunas extremadamente amenazadas como la Cercerta pardilla; gran variedad de garzas de distinto porte y comportamiento, desde la magnifica Garza imperial a los pequeños Avetorillos pasando por las gregarias Garcetas comunes y Garcillas bueyeras y un buen número de gaviotas. Entre ellas destacarían las dos típicamente mediterráneas: la Gaviota de Audouin y la Gaviota cabecinegra.

Y continuaríamos con un larguísimo etcétera en el que no queremos dejar de señalar al espectacular Calamón, el gallo azul de las zonas húmedas, ni la presencia de rapaces como el Aguilucho lagunero y el Águila pescadora cuya presencia es regular en invierno y en paso migratorio.

Y el contrapunto a Els Estanys lo ponen las zonas montañosas situadas al oeste donde aparece el matorral mediterráneo y los bosques de pino carrasco y donde la actividad humana ha generado nuevos hábitats como cultivos de cítrico y, sobre todo, paredes rocosas que son ambientes ideales para el Roquero solitario o el Búho real.

El espectacular Calamón, el gallo azul de las zonas húmedas. Foto: Virgilio Beltran

Importancia relevante para la conservación de las aves

Actualmente podemos decir que Els Estanys d’Almenara, y toda la Marjal, tienen una importancia relevante para la conservación de las aves, por ser una de las zonas húmedas mejor conservadas que quedan en el litoral de la Comunitat Valenciana.

Un patrimonio natural que el Ayuntamiento de Almenara considera de vital importancia que merece conservar por el retorno social y económico de los servicios ecosistémicos que nos brinda su variedad de ambientes y su rica diversidad.

Por ese motivo, se ha dotado als  Estanys de Almenara no solo de infraestructuras y servicios destinados al ocio responsable y al turismo de naturaleza que garanticen el disfrute ordenado del espacio, sino que se la ha dotado de un Aula de Naturaleza para la realización de actividades de Educación Ambiental con una Exposición didáctica pensada para un uso mixto por parte de la población escolar y los visitantes.

Además está prevista la realización de actividades de turismo ornitológico “para todos los públicos” en forma de rutas guiadas por el humedal como la que pudimos llevar a cabo durante la Semana Santa y que grabó el equipo de Samarucdigital. La Marjal de Almenara, en un espacio ideal para la práctica del “birdwatching” y para el desarrollo de actividades de turismo ornitológico como las que ofrece ACTIO Birding.