El Centro Excursionista de Valencia, presente y futuro

El Centro Excursionista de Valencia, entidad decana del excursionismo de la Comunidad Valenciana, deberá abandonar su sede social el 28 de febrero después de tener que solicitar al juzgado la liquidación definitiva del concurso de acreedores.

El CEV había sido propietario de la sede de la Plaza Tavernes de la Valldigna desde hace más de 20 años y ahora al no poder atender las deudas del préstamo hipotecario en los últimos años se ha procedido a un embargo siendo ahora propiedad de Bankia. El ha tenido problemas económicos, unos fruto de la crisis económica, otros derivados de su propia gestión y los más importantes derivados de la falta de apoyo institucional en los últimos 4 años, sin haber recibido ninguna subvención por prestación de servicios a la sociedad como venía haciendo con el Ayuntamiento de Valencia y con diferentes consellerias de la Generalitat, que ayudaban a pagar el elevado IBI del local ya reducir la deuda con el préstamo hipotecario.

Foto: Archivo CEV

El CEV llegó a un acuerdo hace años con todos los grupos políticos del Ayuntamiento de Valencia y esto había sido objeto de reuniones por parte de mi hermano Juan Manuel Ferrís, el Presidente del CEV. Tras el fallecimiento del presidente del CEV parece que los grupos políticos han olvidado de sus compromisos, y lo que nos llega extraoficialmente es que el Ayuntamiento no sabemos si finalmenteva a optar a la compra en Bankia y usarlo como edificio dotacional público ... Tampoco la corporación municipal parece que ha sido capaz después de 4 años de gestiones de ofrecer un local público con un alquiler social a una asociación que recibió hace 25 años la medalla de oro de la Ciudad. Y por último se le pidió al nuevo gobierno local que restituyera el Convenio que mantenía con el anterior equipo municipal que no era una ayuda a fondo perdido sino una prestación de servicios de actividades de tiempo libre y deportes en la naturaleza a los habitantes de la ciudad. Y este Convenio que tantas satisfacciones dio a la ciudad y ayudar a paliar las deudas vio como no se renovaba en 2013 hasta ahora, y que el nuevo gobierno se comprometió a la renovación a partir de 2016, sabiendo que era muy importante su aportación para el Plan de Viabilidad que se aceptó en el juzgado en el proceso concursal.

Demandas sin atender

Los socios del CEV hemos visto cómo se ha pasado de apoyar a la entidad como un referente del excursionismo deportivo (medalla Oro de la Generalitat), cultural y ambiental (medalla del Voluntariado Ambiental GV) no atender sus demandas y ofrecer algún tipo de apoyo a una asociación que en sus 70 años de existencia ha dado refugio en sus locales a multitud de ONG y pequeñas asociaciones.
El CEV ha sido y es un referente en el campo cultural y ambiental promoviendo los Premios Cavanilles, las Exposiciones de Artistas por la Naturaleza y entre otras acciones los Premios de Medio Ambiente Margalló, promovidos por el socio y pintor Michavila en que se premió a diferentes grupos ecologistas como la Carrasca, CEVA Albaida, SASE, Valle de Vernissa y Agro campo de Morvedre.
La entidad inició después de los trágicos incendios de la Calderona y Penyagolosa en 1992, las campañas de voluntariado ambiental desde 1993 hasta 2016, siendo un referente del voluntariado con las asociaciones conservacionistas y la Universidad de Valencia. La participación y compromiso del CEV por el territorio se concreta en la presencia desde su creación en el CAPMA de la Generalitat, en las juntas rectoras de los parques de Calderona y Chera-Sot y los paisajes protegidos de Benicadell, así como en numerosas iniciativas de normativas de protección de los espacios naturales, vías pecuarias, árboles monumentales, uso forestal, etc ...
Todo ello realizado con socios voluntarios que desde el Instituto Valenciano de Excursionismo y Naturaleza han promovido acciones conjuntas con colectivos ecologistas en el Día Internacional de la Montaña Limpia, campañas de protección de cavidades, jornadas de promoción del ecoturismo y recuperación del patrimonio rural, creación de la Plataforma rural Valenciana con la Unión de Llauradors, ecologistas y cooperativas, Custodia del territorio, etc ... y en el campo de los hitos deportivos en el CEV es de destacar la expedición a Groenlandia (1970) la primera ascensión valenciana al Everest (1991), las numerosas expediciones internacionales espeleológicas de caraceter científico con las Universidades y ascensiones a los primeros 8.000 valencianos. En el campo educativo y formativo en el CEV invirtió tiempo y dinero con fondos europeos de desarrollo rural en la creación de refugios-escuela en la Calderona, Alto Turia y Penyagolosa dedicados a actividades de educación ambiental y voluntariado.

Foto: Archivo CEV

Tarea voluntaria durante 70 años

La tarea voluntaria de los socios les ha llevado en estos 70 años en el equipamiento de zonas de escalada, topografía de cuevas, estudios científicos sobre ecoturismo y caminos históricos y especialmente los trabajos de marcaje con voluntarios del sendero europeo de gran recorrido GR10 y del GR7 en la provincia de Valencia y un amplia red de senderos locales en Calderona, Penyagolosa, Alto Turia, Bernia y otros parajes de la CV.
Es difícil resumir el esfuerzo colectivo de tantos valencianos que han aprendido a amar nuestras montañas y los parques gracias a la labor formativa y educativa con niños, jóvenes, familias y adultos, pero lo que si evidencia es que la pérdida de esta parte del tejido asociativo valenciano, es un hecho que afecta no sólo a los socios de la entidad sino que perjudica la salud cultural y ambiental de la ciudad que pierde uno de sus barcos insignias de los que años atrás hacían gala la clase política de acercar en la entidad. Desgraciadamente ya no es posible evitar la disolución de la entidad, ya que no ha encontrado el apoyo esperado por parte de las instituciones valencianas para remontar la situación y seguir con su labor social como entidad de utilidad pública que acoge un importante archivo histórico del excursionismo.
No sé si la clase política valenciana ha estado a la altura de las circunstancias para que Valencia y la Comunidad debían haber ayudado a esta asociación que ha marcado un camino a los ciudadanos donde la sostenibilidad, la estima por el territorio y la lengua y la solidaridad ha sido su guía durante más de 70 años. Los socios dejaremos nuestra sede para crear una Sociedad Excursionista que espera mirar hacia el futuro para olvidar estos últimos años de abandono y falta de sensibilidad por parte de aquellos que gestionaron y gestionan nuestra Comunidad y ciudad. Y esta sociedad tendrá como referente los valores sociales, ambientales y culturales de la Colla Excursionista el Sol que hace casi un siglo fue el germen del CEV y el referente asociativo del excursionismo valenciano.

Presidentes del CEV en el 50 aniversario del club en el paraje de Sant esperit en la Calderona (1946-1996). Foto: Archivo CEV

Etiquetas